Cambios y Evolución en la Nota Roja.

Autor: Carlos Arturo Nava Alarcón

La nota policíaca también conocida como “nota roja”, es un género periodístico enfocado a dar detalles de los sucesos involucrados con asesinatos, asaltos y robos que existen en la ciudad, su manera de informar es muy diferente, aquí se busca atraer la atención del lector a través de un texto con grandes titulares, acompañado de una fotografía.

Los sucesos violentos que ocurren en nuestro país siempre han ocupado grandes secciones de los periódicos o medios digitales, se trata de persuadir al lector a través de esa información relevante, dado que un gran sector de la población es atraído por esta noticia, muchas veces es catalogada de sensacionalista o amarillista.

En Xalapa, la capital de Veracruz, muchos reporteros dedicados a cubrir este género periodístico han visto la evolución y cambios a la hora cubrir la “nota policíaca”, sin embargo, las nuevas leyes también han tenido un papel fundamental en esta transición.

Actualmente, al publicar la nota roja algunos lo ven como un retroceso, mientras que otros lo ven como una forma de profesionalizarse en la redacción y además contar con diversos términos y conceptos con los que pueden tener diferentes opiniones, que, sin duda, marcarán un precedente de en el periodismo actual.

En entrevista, el reportero y director del Periódico Rotativo, Hugo Cruz, con más de 40 años de ejercicio periodístico en la nota policíaca, comentó que existen dos momentos importantes al momento de informar, primero, ningún medio puede prescindir de la nota roja, es decir que cualquier medio de comunicación, ya sea impreso o digital, si no incluye en sus publicaciones este género, simplemente “No vende”.

Segundo, es una herramienta para mantener informada a la ciudadanía sobre los sucesos violentos más importantes que acontecen en la ciudad, dejando como principal actor el sensacionalismo y amarillismo, que son circunstancias que se pueden generar dependiendo el hecho.

Por otra parte, comentó que, durante las nuevas reformas a la ley por los delitos de presunción de inocencia, hubo mucha confusión al principio, dejando un precedente al momento de informar.

“Ahora se tiene que tapar el rostro para proteger su identidad, ahora hay que esperar hasta que un juez lo sentencie y una vez que lo sentencie ya se puede sacar la foto del detenido con el rostro descubierto”.

También resaltó el acceso al que se tenía al cubrir un hecho violento, en especial en los homicidios, anteriormente se realizaban las fotografías como si se tratara de un personal de Servicios Periciales, situación que lo llevo tener la información de primera mano y las mejores fotografías.

“Lo que pasa que cuando iniciamos, en aquel tiempo, las mismas autoridades carecían de equipo fotográfico y nosotros participamos en cuestión de fotografía, apartábamos las pruebas como parte de un caso, éramos parte de Servicios Periciales, ellos no tenían laboratorio de revelado, en el periódico teníamos todo el equipo, entonces a veces nos apoyábamos con eso y teníamos esa facilidad de entrar a fotografiar”.

En la actualidad, es casi imposible realizar este tipo de fotografías, las autoridades realizan el acordamiento para que no se contamine la escena del crimen, se requiere de más parámetros y cuidados al realizar la cobertura de la nota roja, porque el hecho de delimitar la zona también ha sido utilizado por las autoridades encargadas de recolectar los indicios, de alejar al reportero y no permitirle una cobertura eficiente, obstaculizando con ello la cobertura noticiosa.

Por otra parte, Miguel Salazar, reportero especializado en la cobertura de Nota Roja, comentó que la información policíaca publicada en el Diario de Xalapa está muy familiarizada con sus lectores.

“La importancia de esta información es fundamental, además de que los lectores están muy relacionados con este tipo de información, porque además de la información política, social y cultural, pues la información policíaca es una parte esencial de un medio de comunicación”, agregó.

Con un panorama sobre la “Nota Policíaca”, podemos entender que es fundamental publicar noticias de este género periodístico, que, a diferencia de otros, nos permite ver la cruda realidad de los hechos violentos que existen en la cuidad, teniendo en cuenta que se puede llevar a juicio personal, el actuar de las autoridades encargadas de la impartición de justicia y de combatir la inseguridad.

Carlos Hernández, reportero y corresponsal de La Jornada Veracruz, señaló que es un tanto exagerado las nuevas reformas a la ley en materia de presunción de inocencia, y destacó que, en un homicidio, no mostrar características que conlleven a una buena investigación, se cae en un atraso al momento de informar.

“Hay otras cosas que considero un tanto exageradas por el hecho de que te censuren la información en el sentido de que, si hay alguna víctima de algún delito que hayan asesinado, pues que no se dé a conocer las características físicas de estas personas, de su vestimenta, si tenía tatuajes, alguna seña en particular, yo creo que en esa parte si hay un retroceso porque anteriormente con este tipo de características si salían de manera pública, incluso era más fácil identificar a la víctima”.

A pesar de las diferentes opiniones acerca de esta labor periodística, al informar “Nota Roja”, caemos en la sensación de poder ver este género noticioso como una situación de morbo, dado que a una parte de nuestro ser le gusta ver fotografías explícitas, de asombro, que los lleve a imaginarse como sucedieron los hechos, como por ejemplo una balacera, el rescate de una persona secuestrada, o atropellada, así como la infinidad de expresiones y sensaciones de la información policíaca provocan leer este género.

El Gobierno de Javier Duarte, el más letal contra los periodistas

Datos extraídos de la página web de Articulo 19, en el apartado Periodistas Asesinados en los párrafos (1, 2 y 3) mencionan, “ARTICLE 19 ha documentado 157 asesinatos de periodistas en México, en posible relación con su labor. Del total, 145 son hombres y 12 son mujeres. De estos, 47 se registraron durante el mandato anterior del presidente Enrique Peña Nieto y 37 en el actual de Andrés Manuel López Obrador. El gobierno de Javier Duarte, que comenzó en diciembre de 2010 y finalizó el 30 de noviembre de 2016 en Veracruz, ha sido el más letal para los comunicadores: 18 periodistas asesinadas/os (incluyendo al fotoperiodista Rubén Espinosa). Dicho estado tiene el mayor registro de asesinatos de periodistas, con 31”.

Con estos datos duros, Veracruz marca un precedente de un antes y un después, pues no solamente los reporteros que cubrían la información policiaca estaban en riesgo por dar a conocer los múltiples hechos violentos, sino que era general, es decir todo aquel que hablara mal del gobierno de Javier Duarte, era perseguido, acosado y amenazado, para terminar lamentablemente sin vida, incluso aquellos que trataban de mostrar a la sociedad, el saqueo y los altos índices que ocupaba Veracruz en ese sexenio.

Don Hugo Cruz, el reportero más experimentado de Nota Roja en Xalapa, relató la difícil situación que había en aquellos años para cubrir los hechos violentos, y recordó que había compañeros amenazados que llegaron a exiliarse del estado y del país.

Comentó que él pudo terminar así, pero se mantuvo firme en su labor periodística, a pesar de sufrir la muerte de uno de sus mejores amigos y compañero de trabajo “Víctor Báez”, por lo que, con la voz entrecortada, soltó algunas palabras que le recordaron aquellos días.

“Cubrir la muerte de un amigo y compañero de trabajo, la muerte de Víctor Báez, eso es lo más difícil, pues era un amigo y la forma en la que lo mataron. Yo creo que, a raíz de la muerte de Víctor, se frenó un poco los ataques al periodismo policíaco, fue frenando poco a poco. Era un aviso, incluso a muchos compañeros de aquí de Xalapa los exiliaron, a mí me trataron de exiliar, pero no lo permití, yo no tenía ninguna amenaza”.

“Era tan difícil ejercer la profesión, que grupos delincuenciales afectaron y condicionaron la información policiaca”, recuerda Miguel Salazar, experimentado reportero de temas policiacos, y quien vivió una de las etapas más difíciles para ejercer el periodismo en Veracruz.

“Durante la administración estatal de Javier Duarte de Ochoa, que fue del 2010 al 2016, fue una etapa difícil para ejercer el periodismo, no solamente en el ámbito policíaco, sino en todas las especialidades, se debe a que hubo mucha censura, además hubo la contaminación de grupos delictivos que afectaron o condicionaban el desarrollo de la información policíaca”.

Finalmente, Carlos Hernández, confirmó la terrible situación que padecían los reporteros que decidieron enfrentar al gobierno de Javier Duarte, porque en esos años vieron amenazada su integridad física-

“El gobierno Duartista fue uno de los más crueles, más sanguinarios no sólo para el periodismo, sino para la sociedad en general, si mal no recuerdo, fue cerca de una veintena de periodistas que fueron asesinados durante el gobierno de Javier Duarte y esto colocó a Veracruz en ser uno de los estados más peligrosos para ejercer el periodismo”.

Hoy en día Veracruz ocupa el primer lugar a nivel nacional como el estado más peligroso para ejercer periodismo, y aunque los índices de asesinatos de los informadores han ido disminuyendo con el paso de las administraciones, no han cesado; tan sólo en el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, 9 reporteros han sido asesinados de forma violenta y a nivel nacional en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador van 50.