POLITICA INJUSTA

Era un día como cualquier otro durmiendo con mi mamá una señora de 38 años, cabello largo, color negro, ojos grandes, de estatura no muy alta, estaba embarazada llevaba unos 7 u 8 meses yo era una pequeña niña de 7 u 8 años, chaparrita, ojos grandes cabello corto y negro. Dormíamos juntas como habitualmente lo hacía, solo que esta vez parecía ser diferente, pues mientras dormíamos al fondo se escuchan unas voces diciendo: “muévanse, muévanse” y mi mamá y yo nos despertamos y mi mamá dijo ya llegaron y yo me asomé ala ventana que estaba cerca de la cama, era una ventana grande y al asomarme veo dos camionetas negras blindadas con dos hombres en cada esquina de la camioneta, algunos hombres eran robustos otros eran gordos y altos y cada quien portaba armas largas.

Mientras que mi mamá iba bajando embaraza las escaleras poniéndose el pantalón y yo voy detrás de ella, cuando bajamos vimos a dos hombres armados uno de complexión delgada, alto, con ojos medianos, el otro era gordo con ojos pequeños y alto, los dos portaban pasamontañas.

Ellos cuando llegaron empujaron la puerta, ya que la puerta de color café no tenía seguro y mis primos estaban durmiendo en un sillón de madera y las personas armas los despertaron a uno de mis primos le dieron un cachazo para despertarlo mientras decían levántense y muévanse, mis abuelos espantados, llorando y rezando les piden que no les hagan nada y que se llevaran todo lo que quisieran pero que no les hicieran nada.

Mi mamá y yo bajamos y al momento de que las personas armadas ven a mi mamá dijeron: “es ella, ella” y mi mamá y todos estábamos preocupados llorando del miedo y en eso ellos nos empiezan a subir a la planta alta a todos, mis abuelos tenían mucho tiempo sin subir ya que los dos estaban enfermos y mi abuelo tenía problemas con su pie y no podía subir, pero ellos los empujaban para subirlos al primer cuarto que está subiendo las escaleras cuarto donde mi mamá y yo dormíamos.

Mientras tanto en la planta baja de la casa se escuchaba como empezaban a tirar las cosas muebles, la televisión, voltearon mesas, rompieron platos, vasos y la planta de arriba igual habían personas tirando cosas, abrieron los closet y sacaron toda la ropa, cosas de valor como anillos, cadenas, pulseras de oro, dentro de un closet había una alcancía de “hello kity” de plástico donde ese dinero era un ahorro para celebrar mi bautizo, se robaron también una cámara de video en donde habían muchos recuerdos de la boda de mi tia y momentos familiares.

En lo que las otras personas armadas revisaban y saqueaban toda nuestra casa los dos hombres armados el flaco y el gordo estaban con nosotros dentro del cuarto mientras nos amenazaban mis primos se encontraban boca abajo en el piso asustados, mis abuelos mi mamá y yo estábamos sentadas en la cama en eso la persona de complexión gorda apuntó con un arma hacia la panza de mi mamá mientras mi mamá rezaba y les pedía que no le hicieran nada pero en ese momento la persona de complexión delgada dijo: “si no hablan o no dicen donde está nos llevamos a la niña” ósea a mi, en ese momento yo dije:” no nos hagan nada por favor, llévense lo que quieran” y saque la cartera de mi mamá y se la di diciendo, “tomen, es lo único que tenemos”

El hombre flaco dijo una grosería que jamás la había escuchado lo cual yo me asuste porque lo dijo gritando él dijo: “no entienden que somos los Z y que se los va a llevar la VERG** a todos si no nos dicen dónde está, si nos dicen no les haremos nada”, todos asustados no dijimos nada y ellos se dieron cuenta que realmente no ibas a decir nada así que se mejor se fueron.

2 horas después bajamos y vimos toda nuestra casa tirada, la televisión, fotografías rotas y llorando de tristeza y enojo todos nos abrazamos y empezamos a recoger algunas cosas en eso vemos que llega la policía a preguntar qué había pasado, que, si estábamos bien, pero mi mamá no quiso decir nada por que aun estábamos en shock y le dijo al oficial: “sabe que mejor retírese ya de nada sirve y ve llega después de los tiros”

Pasó una semana de lo sucedido y tomamos de decisión de salirnos de la casa mi mamá y yo nos fuimos a vivir a casa de su ex suegra a la localidad de Juan Diaz Covarrubias localidad que pertenece al municipio de Hueyapan de Ocampo, queda a 10 o 15 minutos del municipio, en esa localidad se encuentra un ingenio que cada vez que hay zafra todo covarrubias está lleno de tizne, se le conoce como zafra al tiempo que dura el proceso mediante el cual se cosecha la caña y se fabrica el azúcar. En México la zafra comienza en noviembre y finaliza en julio del siguiente año, incluso llega un poco a hueyapan.

Mis abuelos se fueron a Nanchital, Nanchital es un municipio del estado de Veracruz que se encuentra a 3 o 4 horas de Hueyapan, Nanchital tiene una gastronomía muy explícita como por ejemplo hay Mariscos (camarón, pulpo, ostión, ceviche, filetes de pescado), carne de monte (armadillo, tepezcuincle), memelas (tortillas con frijol y carne adobada), carne de monte (armadillo, Tepezcuincle),mis primos se fueron a Acayucan, Acayucan es también es un municipio del estado de Veracruz que se encuentra a 40 o 45 minutos de Hueyapan, un ese momento fue muy triste porque nos habíamos separado todos y no nos podíamos comunicar por seguridad.

Pasamos como 2 meses fuera de casa y cuando regresamos empezamos a asegurar la casa, a la puerta principal le pusimos doble chapa y ya casi no habría la puerta principal, si salíamos y entrábamos era por la puerta trasera de la casa.

De hecho, hasta el día de hoy mis primos no han venido para acá por que aun tienen el miedo de que pase lo mismo y ya no se sienten seguros al estar aquí por que quedaron con ese trauma.

Los Zetas o Cártel de Los Zetas fue un cártel y organización terrorista mexicana, considerado como el cártel más poderoso y sanguinario de México, cuyas actividades delictivas iban desde el narcotráfico, terrorismo, transporte de drogas, extorsión, secuestro, homicidios, tráfico de personas, hurto de combustible, robo a bancos, camiones de valores, lavado de dinero hasta delitos informáticos.

El estado de Veracruz, al este del país, ha sido el epicentro de esta crisis. Desde septiembre, se han registrado allí 117 actos de violencia, lo que incluye el asesinato de 16 políticos (casi la quinta parte del total de muertes), pese a ser el octavo estado más violento del país en términos del total de homicidios. Oaxaca tiene el segundo mayor número de ataques con 68, casi la mitad de Veracruz.